TECLife: comenzamos nuestra tercera y última semana en Vancouver

Josep Gasch Rebollar, monitor de TEC Idiomas en Vancouver.

 Durante estas dos semanas, no hemos parado. Por ello, intentamos recuperar nuestras fuerzas al máximo durante el fin de semana en Vanvouver. 

Comenzamos la semana haciendo un tour en bicicleta por Stanley Park.

Kilómetros de preciosas playas, fauna local, lugares para comer, monumentos naturales, culturales e históricos. Además, muchos rincones preciosos que tuvimos la oportunidad de descubrir. Así pues, el parque ofrece muchos lugares con vistas fascinantes que serán difíciles de borrar de nuestra mente.

Tras dos horas de paseo apreciando las magníficas vistas, era hora de descansar y recargar las pilas para el día siguiente.

Comenzaba el martes y, tal y como teníamos planeado, era hora de ir a jugar a Lazer Tag. Y vosotros os preguntareis, ¿qué es Lazer Tag? Pues bien, tras inscribirnos en las listas y realizar equipos al azar, se nos ofreció un equipaje el cual estaba compuesto por un chaleco y una pistola que se iluminarían en función del equipo al que fuéramos asignados.

En nuestro caso, y tras entrar en el recinto destinado al juego, se apagaron todas las luces y debíamos encontrar a los miembros del equipo contrario con el fin de apuntar a las partes iluminadas del chaleco que cada participante llevaba puesto.

Además, en dicho chaleco se apreciaba la cantidad de puntos que cada participante tenía acumulados. Por tanto, el objetivo principal era disparar a los componentes del equipo rival con la finalidad de  conseguir puntos sin ser alcanzado.

Llegado el miércoles, y con muchas ganas de afrontar nuevos retos, tuvimos la oportunidad de ir a la bolera. Pero en este caso, tuvimos la oportunidad de jugar en un espacio el cual estaba dotado de luz ultravioleta, la cual hacía que tanto los bolos como la pista se iluminaran en la oscuridad. Ha sido una experiencia única la cual nos impacto bastante ya que nunca habíamos tenido la oportunidad de practicar este deporte tan desconocido para nosotros.

Ya a punto de concluir nuestra estancia, y concretamente el jueves, se nos brindó la oportunidad de acudir al desayuno que los miembros del colegio habían preparado para todos nosotros. El desayuno estuvo básicamente constituido por Pancakes (tortitas) y zumo natural. Como no, tampoco podía faltar la Nutella y el Sirope de Arce para acompañar.

Pero esto no era todo, llego la tarde y tocaba ir de excursión. Pero esta vez nuestro Destino era Granville Island. Para aquellos que nunca hayáis oído hablar de este lugar, comentaros que nos fascinaron las vista que desde allí pudimos contemplar. Entre ellos, destacar los grandes y famosos Skycrapers, la zona portuaria y el gran mercadillo al cual no nos pudimos resistir.

Llegado el viernes, nuestro último día, y día en el cual nuestros estudiantes se graduaban tras estar inmersos durante 3 semanas en un curso intensivo adecuado a sus correspondientes niveles. Fue un día duro, despedidas agridulces, una mezcla de emociones y sentimientos confrontados. Pero bien, sabíamos que este día llegaría, y que debíamos disfrutar al máximo nuestras últimas horas en Vancouver.