No hace falta que digamos que un viaje es toda una aventura sea cual sea el destino. Nos vamos para vivir nuevas experiencias, descubrir nuevos lugares y meternos de lleno en una cultura diferente a la nuestra; una nueva hazaña para nuestro diario vital.
En Tec Idiomas, organizamos viajes de idiomas al extranjero, y algunas de las dudas más comunes de nuestros aventureros son sobre cómo funciona la asistencia médica en el extranjero. Se trata de una cuestión que a muchos les preocupa antes de llevar a cabo un viaje, tanto de corta como de larga estancia. Por ello, vamos a ver lo más importante que debéis conocer.
Sí, tienes derecho a tener cobertura sanitaria en el país al que viajes, pero para ello, antes de llevar a cabo tu aventura tendrás que asegurarte de llevar la tarjeta sanitaria europea (TSE). Se trata de una tarjeta individual que facilita el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) y deberás llevarla junto al documento de identidad, o pasaporte.
La TSE te permite recibir cobertura sanitaria en el extranjero en los servicios públicos de salud del país al que vayas. Es muy importante que tengas claro este último aspecto ya que la tarjeta no tiene cobertura en servicios médicos privados ni tampoco tendrá cobertura si el motivo de tu viaje es para someterte a un tratamiento médico específico.
También tienes que tener en cuenta que cada sistema sanitario funciona de forma independiente a pesar de estar dentro de la Unión Europea y por tanto, puede que algunas prestaciones tengan un coste para el asistido. Esto quiere decir que es posible que tengas que anticipar un importe para que te atiendan o pagar la visita médica que precises, por lo que, antes de emprender tu viaje, infórmate de las condiciones de asistencia sanitaria del país. Es cierto que el pago que hagas para recibir asistencia sanitaria en el extranjero te será reembolsado si lo solicitas en el organismo nacional del país donde estés o una vez regreses a España.
Sí, tienen la misma validez jurídica para que puedas tener asistencia médica en el extranjero y en las mismas condiciones. Con ambas deberás llevar el correspondiente DNI o pasaporte. Además, tanto la TSE como el Certificado Provisional Sanitario (CPS) son intransferibles.
Las diferencias más notorias es que el CPS puede remitirse en el momento, es decir, no tendrás que esperar hasta 10 días que puede tardar la TSE; y que, éste último tiene una vigencia de dos años, y en el caso del CPS es válido por 30 días ampliables hasta como máximo 90 días. Para llevar a cabo esta ampliación tendrás que acudir personalmente a los servicios provinciales sanitarios de tu residencia (o en caso de dar autorización, también podrá hacerlo un familiar).
En el caso de que viajes fuera de la Unión Europea y requieras asistencia médica en el extranjero, lo primero que debes conocer es si ese país tiene algún tipo de convenio con España para ofrecer atención sanitaria.
En el caso de que dispongan de él, deberás ir provisto de un formulario (varía en función del país al que asistas), y lo emiten los Centros de Atención e Información de la Seguridad Social en España. Una vez acudas al centro sanitario del país donde viajes, tendrás que acompañar dicho formulario con el DNI o pasaporte.
Si no existe ningún tipo de convenio es recomendable que contrates un seguro privado de viaje que incluya gastos médicos, y debes asegurarte que la cobertura médica en el extranjero sea muy amplia, e incluya servicio y asistencia de emergencias las 24 horas.
Obviamente, si tienes una enfermedad crónica y necesitas tu medicación cerca, podrás llevarla contigo. Lo más importante y que tienes que tener en cuenta es que deberás guardar la medicación en el equipaje de mano, dentro de sus envases correspondientes y con las etiquetas visibles. También es importante que, antes de emprender la aventura, acudas a tu médico de cabecera y le informes de que vas a llevar a cabo un viaje. Es necesario que tengas toda la información posible sobre tu situación, el tratamiento que requieres, y los medicamento que viajarán contigo.
Si en tu caso no tienes ningún tipo de enfermedad crónica, pero eres una persona muy previsora y viajas más a gusto con tu botiquín de emergencia, tendrás que tener en algunas cosas en cuenta antes de hacerlo. Por ejemplo, en el caso de viajar con medicamentos, hay un acuerdo entre los países de la Unión Europea para que una persona pueda llevar una cantidad de medicamentos que represente el tratamiento de hasta tres meses. Así que no debes excederte de previsora o previsor.
En ambos casos, es importante que antes de llevar a cabo tu viaje, te informes sobre las normas relacionadas con este punto del país que visites, ya que muchos tienen una regulación específica para la introducción de medicamentos.
Antes de acabar, queríamos repasar el vocabulario sanitario en inglés más importante o usual para poder salir airoso en caso de emergencia médica en el extranjero:
Me siento enfermo: I feel sick/ill
Me gustaría ver a un médico: I would like to see a Doctor
Es una emergencia: It’s an emergency
Me duele mucho aquí / me duele mucho la (garganta, estómago, pecho, cabeza): It hurts a lot here/ My (throat, stomach, breast, head) hurts a lot.
Tengo (sangrado, tos, diarrea, fiebre, infección, esguince): I have a (bleeding, cough, diarrhea, fever, infection, sprain).
Receta: Prescription
Análisis de sangre: Blood test
Anestesia: Anaesthesia
Inyección: Injection
Antibióticos: Antibiotics
Ya hemos visto que antes de emprender un viaje es necesario informarse acerca de la asistencia médica en el extranjero, pues es una cuestión prioritaria, y que funciona de forma diferente en distintos lugares. Siempre es bueno ser previsor con este tema, y resolver posibles dudas antes de viajar. En Tec Idiomas sabemos los detalles más importantes de los viajes al extranjero, y si tienes alguna duda o consulta, puedes contactar con nosotros, estaremos encantados de ayudarte.
¡Buen viaje!